Cuantos de nosotros hemos esperado las fechas de Halloween con entusiasmo para dar rienda suelta a nuestras ideas más terroríficas, ideamos las mejores máscaras, diseñamos los disfraces más tétricos y que me dicen de pedir dulce o truco, sin duda es una de las fechas más pintorescas de las que podemos disfrutar en la actualidad, una celebración que es acogida por chicos y grandes por igual, pero, ¿que hay detrás de esta celebración alegre y carnavalesca?, ¿qué hay detrás de estas terroríficas máscaras y grotescos disfraces?, ¿Que hay detrás del mal entendido, “Halloween”? 

Bueno, para comenzar podemos hablar un poco de la historia que todos sabemos, la historia que sitúa los orígenes del Halloween hace más de 3000 años, en donde los pueblos Celtas europeos celebraban el día de “Samhain”, que sería como su año nuevo, sabemos que en esa celebración las personas despedían a Lugh, el dios del sol, pues comenzarían las noches frías y oscuras típicas de otoño, dentro de la mitología que hay alrededor del Samhain se creía que los espíritus y otros seres viajaban al mundo espiritual más allá de los cielos, este viaje o transito espiritual era muy peligroso para las personas que celebraban el Samhain, pues los seres demoniacos que ese día transitaban podían poseer o llevarse con ellos a las personas que estuvieran desprotegidas, es por eso que las personas utilizaban pieles de animales para disfrazarse de manera burda y grotesca, con el fin de que los entes demoniacos y otros espíritus los confundieran con uno más de ellos y los dejaran en paz, es curioso mencionar que, en algunas partes de Europa, la noche de Samhain se les permitía a las personas vestir y personificar al género opuesto, también se considera que usar mascaras o pintarse el rostro de negro tenía como fin representar a algún ser o espíritu en especial, sobre todo si se había hecho un trato o pacto con este ser durante el año corriente, cosa que era muy común para obtener buenas cosechas u otros favores.

Las personas que preferían no salir de sus casas ese día, dejaban comida y bebida en frente de sus puertas como una especie de ofrenda para los espíritus que deambulan libres esa noche, una especie de truco o trato antiguo, pues el objetivo de dejar esas ofrendas no era otro que el intercambiar las viandas por la vida de los habitantes de la casa en cuestión, esto sin duda ha llegado hasta nuestros días transformado en la bien conocida frase “truco o trato”, en donde personas disfrazadas de demonios y otras aberraciones espirituales piden dulces o alimento bajo la amenaza de hacer un truco o fechoría a las personas que se nieguen a darles dicho botín. 

Pasado el tiempo, la fiesta de Samhain comenzó a mezclarse con festividades romanas y de otras culturas, pues en el siglo VII el día 1 d noviembre fue declarado “día de todos los santos”, y la festividad del Samhain tuvo que retroceder un día en el calendario quedando así el 31 de octubre, y comenzó a llamarse el “día de la víspera de todos los santos”, y fue de la deformación de sus siglas en ingles que nació la palabra “Halloween”. 

Hoy en día, podemos encontrar que el Halloween se celebra en diferentes partes del mundo, pero en general se celebra de la misma manera, esta celebración en el presente es más bien una fiesta en honor a lo que es terrorífico, como pueden ser películas de terror, culto a diferentes personajes de la cultura popular de las diferentes regiones, celebración de los mejores disfraces y máscaras, las cuáles son mucho más valoradas si son de confección artesanal, visitar atracciones terroríficas, relatar historias de terror y en general todo lo que puede ambientar el día y la correspondiente noche en un contexto de terror y misterio, un fenómeno predecible y aceptado por unos pero rechazado por otros, es la celebración de los personajes de la cultura popular ligados al terror, algunos con nombre propio y algunos más como un concepto, dentro de la primera categoría encontramos a los personajes de películas consideradas de culto, y dentro de la segunda categoría encontramos a los famosos “zombis” y los monstruos considerados clásicos del cine, como el hombre lobo, los vampiros o las momias, de los que las personas se disfrazan sin representar necesariamente a un individuo en particular.

Las leyendas y bulos que hay en torno a Halloween son variadas y  muy diversas, pues van desde las clásicas de los dulces envenenados hasta los relatos de personas que aseguran que en los festivales y desfiles de la víspera de todos los santos, entre la multitud caminan verdaderos espantos demoniacos y entes sobrenaturales, camuflados entre las personas disfrazadas y en el ambiente festivo, estas aberraciones caminan libres en busca de su próxima víctima y es la poca capacidad que tendríamos de reconocerlos lo que los haría mucho más peligrosos que nunca.

Ritos y brujería en Halloween.

También es digno de mencionar que esta noche ha sido tomada por algunas personas dedicadas al ocultismo como una noche de poder, siendo una fecha en la que se celebran rituales de brujería y espiritismo especiales, claro está que esto tiene también buena parte en la mercadotecnia, pues las personas que pagan por presenciar o realizar uno de estos rituales, pagan más caro si el ritual se celebra en la noche de la víspera de todos los santos, esto puede llegar a tener una parte cierta, pues el inconsciente colectivo ya ha cargado esta noche de mucha energía muy especial, que sin duda, bien utilizada, puede ser muy poderosa para la realización de ciertos rituales ocultistas, llegando a ser muchas veces la fecha elegida para la realización de los famosos aquelarres en la edad media y hasta nuestros días.

LEYENDAS URBANAS DE HALLOWEEN.

LOS DULCES ENVENENADOS.

Muchas son las leyendas urbanas que circulan en torno a este día, siendo una de las más famosas la de los “dulces envenenados”.

Se dice que en la noche de Halloween son muchas las personas que testifican haber sido envenenadas o heridas por comer un dulce de los que recolectaron durante esa misma noche, esta leyenda probablemente tenga sus orígenes en el hecho de la culpabilidad que hay en el comer los dulces que recibimos a cambio de una amenaza. De entre las personas que supuestamente han vivido esta experiencia, sobresalen las que relatan que recuerdan cuando un persona desconocida y vestida casi siempre con un extraño traje o “disfraz”, les dio algunos dulces de manera misteriosa y algo lúgubre, la verdad es que si alguien misterioso y lúgubre con manos mortecinas y faz demoniaca me ofreciera dulces, lo penúltimo que haría sin duda es aceptarlos y lo último sería “comerlos”, bueno, recordemos que solo se trata de una leyenda urbana y que nunca se ha tenido registro real u oficial de que alguna vez haya habido algún atentado de este tipo, y de corazón esperamos que sigan así las estadísticas.

La leyenda varía de acuerdo al lugar en donde se cuente, y las variantes van desde dulces envenenados hasta dulces y chocolates con alfileres y cuchillas dentro, veneno esperando actuar y hacer estragos en los cuerpos de los desafortunados que los consuman, cuchillas y alfileres esperando desgarrar la boca y las entrañas de quienes decidan zampar tremendas mordidas a los deliciosos chocolates trucados…

No lo sé, no quisiera hablar de más, pero por si las dudas, te recomiendo encarecidamente que este Halloween, si pides dulces bajo la tradicional amenaza de “truco o trato”, observa muy bien a las personas que generosas te ofrezcan los puños llenos de suculentos confites, pues podrían ser los dulces más amargos que probarías en tu vida…

LOS DEMONIOS ERRANTES DEL DESFILE DE HALLOWEEN.

Son muchas las personas que dan cuenta de haberse topado de frente con inimaginables seres salidos de lo más profundo del infierno durante los desfiles y carnavales que se celebran en la noche de Halloween.

Esta leyenda urbana es realmente estremecedora, pues dota a los desfiles y carnavales celebrados en la noche de la víspera de todos los santos, de más misterio y le da un aire de terror real que ayuda mucho a sentir el misticismo en el aire durante la noche de Halloween. Esta leyenda urbana dice que cuando los desfiles de dicha celebración están a su máxima capacidad, cuando el ambiente es más fuerte y la oscuridad y el frio se ha apoderado casi por completo de la noche, ciertas criaturas de naturaleza demoniaca se unen a la fiesta dejándose ver con su forma natural, pues entre las multitudes de personas disfrazadas, estos seres pasarían desapercibidos y tendrían total libertad de elegir a sus víctimas, hay personas que aseguran haber tenido experiencias con seres de naturaleza vampírica, otros dicen haberse encontrado de frente con seres híbridos entre humano y animal, estos seres zoomorfos serian parte perro, lagarto, rata, insecto y uno de los más extraños de los que he escuchado relatos es de un rarísimo “hombre delfín”, si, ¡caminando por las calles!…

RELATO DE ANA.

Una joven del estado norteamericano de Texas, relata que una noche de Halloween de hace dos años, tuvo un estremecedor encuentro con el mal, el mal en forma de un ser mitad cucaracha y mitad humano…

Ana relata que se encontraba disfrutando del desfile de Halloween que año con año realizan en la localidad en donde reside, sestaba en compañía de su novio y de su hermana con su respectiva pareja, recuerda perfectamente cómo es que ya entrada la media noche, sintió un fuerte antojo de un bocadillo y sin pensarlo mucho se dirigió a un pequeño carrito expendedor de perros calientes, obtuvo su delicioso bocadillo y lo termino de comer rápidamente, fue cuando se dirigió al bote de basura más cercano para depositar el plato de cartón y las servilletas que había ensuciado cuando sucedió, ella cuenta con lujo de detalle cómo es que al dirigirse al bote de basura, se alejó unos cuantos metros de la gran multitud, al cercarse al basurero y depositar ahí su basura se dio cuenta de algo que no había notado antes, había una persona recargada en el marco de una puerta más o menos a dos metros de donde ella estaba, esta persona estaba extrañamente agachada, casi como enconchada y dándole la espalda, a Ana le pareció muy raro el disfraz que usaba, pues parecía que tuviera puesto un traje semirrígido y un tanto lustroso, pues daba algunos destellos luminosos de tonos cobrizos, de altura y complexión de un hombre promedio en la región, pero extrañamente encorvado, fue ahí cuando el ser debió notar la cercanía de Ana y volteo la cabeza rápidamente para mirarla, en ese momento, Ana pudo observarlo claramente, ella describe un ser con torso de cucaracha literalmente, brazos y piernas casi humanos aunque con ciertas marcas, algo parecido a cicatrices grandes, pero de lo que debemos hablar con más detalle es de su cabeza, Ana hace un silencia siempre que debe hablar de la cabeza de ese ser, pues según sus palabras, es lo más horrible y grotesco que podrá ver en su vida alguna vez, verán, la cabeza era literalmente una mezcla entre cucaracha y hombre, con ojos casi humanos pero más redondos y de profunda negrura, boca grande y delimitada por una especie de placa en forma de colmillos o algo parecido, un montículo asqueroso en donde debería estar su nariz, dos antenas horribles y desafiantes que brotaban grasosas por encima de los ojos, sin duda Ana aun tiembla cuando debe describir lo que vio, tanto es así, que casi siempre llega a esta parte de su relato llorando, nerviosa y temblorosa, generalmente no puede seguir hablando, pero de todas formas no hay mucho más que contar, puesto que cuando Ana vio esta dantesca escena, su cuerpo dio un salto hacia atrás de manera involuntaria y violenta, como un reflejo de supervivencia, esto parece que sobresalto al ser cucaracha y de un brinco se escabullo encorvado hasta la esquina más próxima y se perdió en los oscuros callejones de la periferia, cabe destacar que aunque no había mucha gente en ese lugar específico, si había personas en los alrededores, pero nadie se percató de la presencia de ese ser, nadie lo noto o al menos, nadie lo menciono.

Ana por supuesto, llego llorando con sus acompañantes y ellos después de interrogarla fueron deprisa para tratar de encontrar al ser que Ana dijo haber visto, pero por supuesto que no lo encontraron, no encontraron nada más que unas envolturas vacías de frituras y una roca, Ana dijo que tal vez estuviera hurgando esas bolsas, pero está segura que tenía una pata sobre la roca que estaba ahí, incluso preguntaron a las personas que estaban cerca y las que curiosas se acercaron a preguntar si podían a ayudar, pues ella estaba en una especie de crisis de ansiedad, nadie vio al ser, nadie lo noto, nadie excepto una niña pequeña, de unos 3 años, que iba acompañada de su papa y tenía un algodón de azúcar rosa sostenido en su mano izquierda, se acercó despacio a Ana y mirándola a los ojos le dijo:

–: ¿estas llorando porque viste al cucarachón?, no te preocupes, le voy a decir a mi papa que vayamos a nuestra casa para traer el insecticida y la matamos, ¿qué te parece mi idea? No llores nena, ¡yo te cuido!

El padre de la niña rio y justifico el comentario de su hija aludiendo a su fantástica imaginación y tomando de la mano a su pequeña se alejó caminando, esa fue la única corroboración que obtuvo Ana de lo que vio esa noche de Halloween.

Esta es una de las leyendas urbanas más famosas en relación a la noche de la víspera de todos los santos, esta leyenda en especial es curiosa por el tipo de ser que se describe, pero no es la única del estilo, hay muchas leyendas que tratan de seres monstruosos y grotescos que caminan por las calles durante las noches de Halloween, seres que nadie nota, seres que podrían rosar nuestro hombro, seres que podrían caminar junto a nuestros hijos… listos para atacar.

Otra de las leyendas urbanas más famosas que se cuentan en las noches de Halloween es la de las desapariciones de bebes que las brujas usarían para sus oscuros rituales, esta leyenda es más o menos así…

LEYENDA DE LAS BRUJAS ROBA NIÑOS.

Se dice que las personas que han jurado devoción y servicio a la oscuridad pueden obtener grandes y extrañas capacidades pero, no precisamente gratis, pues deben pagar un precio muy alto, el precio es que regularmente deben realizar sacrificios de manera ritual, sacrificios que casi siempre involucran a algún animal, aunque algunas veces, se les exige que no sea un animal sino, un infante, así es, en ocasiones especiales estos monstruos deben realizar el mayor de los sacrificios, que a la vez representa la mayor ofensa contra Dios, el derramamiento de la sangre de un ser puro e inocente para fines oscuros, este ritual solo lo realizan las brujas y brujos de mayor rango, se sabe que una de las fechas en las que este tipo de rituales se realiza, es precisamente durante la noche de la víspera de todos los santos, o sea… la noche de Halloween.

EL RELATO DE JESÚS Y CLARA

Jesús y clara son personas sencillas pero de buen corazón, viven felices en las afueras de la ciudad de México, Jesús es trabajador en una fábrica de jabón y Clara trabaja en casa ocupándose de las labores del hogar, hace poco que Jesús y Clara han sido padres por primera vez, una hermosa bebe alegra los días y las noches de ese pequeño pero armonioso hogar, a pesar de que Clara ha dado a luz hace escasos tres meses, se encuentra completamente recuperada y pasa los días ocupadísima entre las labores del hogar y los cuidados de su recién nacida, como es de esperar Clara cae rendida cuando llega la noche y casi siempre después de cenar no ve la hora de poder retirarse a dormir, aunque eso es un decir, porque sus noches aun no son de sueño corrido, ya que la pequeña Paula aun toma leche materna cada ciertas horas, el ritmo es duro, pero la juventud de Clara y de Jesús los respalda, los días pasan sin más que alegrías y risas por las acciones de Paulita, como le llamaron sus padres.

Paula nació a finales del mes de julio, los días pasan rápido y octubre ya se estaba despidiendo, a Jesús y a Clara siempre les había gustado poner ofrenda clásica en su casa para honrar a los difuntos más recordados de sus respectivas familias, ese año no sería la excepción y ya hablaban sobre las cosas que necesitarían para realizar tal acción, la emoción y la expectativa se podía sentir en el aire dentro de su hogar, Clara se apresuró a realizar la comida que sería servida en la ofrenda y Jesús realizaba las compras de último momento, cabe destacar que ese año su intención era la de realizar la ofrenda más bonita y grande que hubieran realizado hasta ese momento, también se debe mencionar que ese año Clara y Jesús vivirían el suceso más amargo que hubieran podido imaginar en su joven vida, pues la madrugada del día 31 de octubre, fue la noche en que casi pierden a su pequeña hija, con lágrimas en los ojos la joven pareja relata lo siguiente.

–: Eran aproximadamente las 2 de la madrugada del 31 de octubre, recuerdo que ese día no trabaje, por eso me di permiso de dormir sin poner el despertador, aunque para Clara las noches eran casi iguales siempre, los días que no trabajo también descansa un poco más, pues le puedo ayudar a cuidar a Paula mientras ella duerme un rato extra. Recuerdo que esa noche era fría, llovía ligeramente y el ambiente se sentía húmedo, pero aun así estábamos emocionados por la preparación de nuestra ofrenda, preparación que casi siempre comenzamos el día 31 de octubre, pues las comidas, las frutas y las flores deben estar listas, compradas y preparadas siempre el 31 para comenzar a instalarla el día 1 de noviembre y que quede lista para la noche de ese mismo día, recuerdo que clara me dijo que sentía un ligero dolor de cabeza antes de dormir, pero la verdad no hice mucho caso, pues no me pareció relevante en ese momento, después entendería que ya había comenzado el ataque hacia nuestra familia, no recuerdo bien el momento en que me quede dormido, pero recuerdo que desperté sobresaltado por un fuerte ruido que se escuchó en la azotea, escuche como si se hubiera azotado un costal sobre el techo, un ruido sonoro y fuerte, me pareció raro pero no imposible, pues vivimos en una zona popular de la ciudad y cabe la posibilidad de que los vecinos pudieran hacer alguna broma o pudieran haber tirado algo por accidente, aunque me llamo  mucho la atención la hora, pues casi eran las 3 de la madrugada, gire mi cabeza para mirar a Clara y a Paulita y vi que estaban bien, dormían plácidamente y  aunque me extraño también me sentí reconfortado, no recuerdo más hasta que desperté sobresaltado nuevamente por el sonido de un golpe seco que parecía fue en la otra habitación de la casa, recuerdo que cuando desperté Clara estaba amamantando a Paula y me miro con los ojos grandes y el dedo índice delante de su boca, la mire extrañado y sigiloso me incorpore un poco, Clara me dijo bajito que hacía unos 10 minutos que se escuchaban ruidos en la sala de la casa, como si se cayeran cosas, me dijo que creía que era una rata que pudiera haber entrado durante el día y se hubiera ocultado hasta que sintió que la casa estaba solitaria, asentí con la cabeza y seguimos escuchando lo más atentos que pudimos, Paula seguía comiendo leche materna y parecía que no se inmutaba en absoluto, nos mantuvimos atentos un rato más y mire el reloj, 3:45 de la madrugada, sentí que no era el momento indicado para salir a averiguar que sucedía, pues la idea de la rata ya la había comprado en mi mente y pensé que una rata podía esperar hasta mañana, recuerdo que pensé esto y les juro que no recuerdo más, creo que caí en una somnolencia profunda, fue hasta las 5 de la mañana cuando mis ojos se abrieron de nuevo, Clara lloraba y me levante como de rayo, ella estaba sentada debajo de la cama, en el suelo, sostenía en sus brazos a Paula, de inmediato le pregunte qué había sucedido, pero ella solo lloraba y movía la cabeza, mire para todos lados pero solo pude ver que la lámpara de buro estaba tirada en el suelo y rota, más allá de eso no había nada extraño, revise por alrededor y después abrace a Clara y le pedí que por favor me hablara, que me dijera que había pasado y que si era necesario ir al hospital o algo parecido me dijera rápido, pero ella suspiro profundo y me conto una historia por demás increíble y terrorífica…

me dijo que cuando yo me quedé dormido, termino de amamantar a Paula y se disponía a conciliar el sueño de nuevo cuando se escuchó un golpe fuerte en la puerta de la recamara, me dijo que me movió y me hablo pero no respondí, que estaba como anestesiado, sumido en un sueño tan profundo que no me permitía despertar aunque me movía y me hablaba, me relata que en eso estaba cuando ella misma sintió una pesadez tan fuerte y abrumadora que en pocos segundos ya casi no podía tener los ojos abiertos, sentía que Paula se le caería de los brazos por no poder mantenerse despierta, ella estaba aterrada, me dice que sentía que había peligro y que ese peligro estaba más centrado en Paula, sentía que nuestra pequeña hija estaba en peligro pero aun así, no podía mantenerse despierta, es como si su cuerpo no respondiera a lo que ella deseaba, me dijo que cuando estaba a punto de quedarse dormida, la puerta se abrió poco a poco y pudo ver unos ojos rojos entrar lento y dirigirse hasta ella, esos ojos eran rojos y brillantes, fulgurantes y a la vez, increíblemente malignos, Clara estaba prácticamente dormida y le preocupaba mucho, pues sabía que si eso sucedía no volvería a ver a Paula, al menos no con vida, me dijo que en ese momento no supo más de ella y se sumió en la negrura de la oscuridad interna que abrazo su ser completamente, y así fue hasta que despertó sobresaltada cerca de las 5 de la mañana, Paula no estaba en sus brazos ni en la cama, salto de un brinco y descubrió que había un bulto envuelto en cobijas cerca de la puerta, se abalanzo hacia el bulto y descubrió que era Paula, envuelta en cobijas pero… ¡bien!, estaba bien y sana, durmiendo con tranquilidad, la levanto entre sus brazos y la reviso con desesperación, estaba bien y completa, toda su ropa y todo su cuerpo estaban bien excepto una cosa, en los costados de su cuerpecito, había unas extrañas marcas negruzcas como de unos largos dedos que rodeaban su torso, como si unas manos largas y huesudas hubieran tomado a la bebe por los costados de su cuerpo y se hubieran impreso en su piel, eran manchas negruzcas, ligeras pero bien diferenciables, fuera de eso, Paula estaba bien, de hecho despertó mientras Clara me platicaba lo sucedido y con una gran sonrisa nos miró y pidió de comer a su manera, ese día no deje de dar gracias a Dios porque mi hija aún está con nosotros, pues sé que lo que fuera que visito nuestra casa esa noche, venia por ella.

¿Porque no se la llevo?, ¿por qué no le hizo más daño que esas manchas que no parecen molestarle en absoluto?, ¿por qué mi familia?, ¿por qué mi hija?, creo que son preguntas que no podre responder nunca y creo que es mejor así, solo espero que no vuelva a suceder nunca más…

En esta ocasión, esta versión de la leyenda termina con un final feliz, pero hay otras versiones en donde la bruja si se lleva al bebe en cuestión y nunca lo vuelven a ver, o incluso no se lo lleva pero termina con su vida en el mismo cuarto en donde duermen sus padres a centímetros de distancia, cabe recordar que en algunas partes de México y Sudamérica, este tipo de relatos y leyendas son propias de cualquier época del año, pero sin duda es una leyenda más de las que circulan con mucha más frecuencia en fechas de Halloween, como la de Jesús y Clara, que sucedió precisamente durante la noche de un 31 de octubre. 

Para terminar, solo me resta decir que este próximo 31 de octubre tengas mucho cuidado, trata de no salir por la noche de tu casa, prepara golosinas y dulces para repartir, pues nunca sabrás si solo estarás dando unos dulces a algún niño curioso o, estés pagando por tu vida a un ser demoniaco que no dudara en aplicarte un “truco” si no recibe lo que espera…